4 de julio de 2014

Tres dificultades de ser papá andando fuera de casa

Hoy cumplo 33 años, y dentro de un mes nacerá mi segundo hijo. Sabemos que con dos hijos mi mujer y yo tendremos que aplicar, lo que le conocen en el fútbol como  marcación personal. Sí mi esposa está con mi hija, yo tendré que estar con mi hijo, y viceversa. Será todo un reto, que de inicio sabemos que será muy cansado y en momentos agotador, pero también estamos seguros que nos traerá muchas satisfacciones y felicidad.

Quería aprovechar este post para hablar de algo que me ha sucedido en estos últimos meses y que en mis 33 años de vida jamás lo había vivido. Me he dado cuenta en estos meses que sí ser mamá y andar con hijos pequeños en la calle es complicado; ser papá y andar con hijos pequeños en la calle es doblemente complicado.



Les comparto unos cuantos puntos, que fundamento con la experiencia que he tenido a lo largo de estos últimos meses acerca de las dificultades que se han presentando cuando ando solo con mi hija. A veces ella y yo vamos a parques, plazas, centros comerciales, restaurante; y es justo ahí, afuera, en donde se han presentado estas dificultades.

La primera dificultad con la que me he topado al andar fuera de casa, es cuando mi hija llena su pañal y es necesario cambiárselo, como papá es complicado encontrar un lugar en donde poder hacerlo. En muchos baños de restaurantes o centros comerciales hay áreas para cambiar al bebé, pero en el 99% de los casos todos estos cambiadores ¡están en los baños de las mujeres! Sí, se entiende que sean las mamás quienes cambian el pañal a sus hijos ¿pero, qué acaso los papás no cambiamos pañales? ¿cambiar pañales es una actividad exclusivamente de las mamás? Pero bueno, luego me pongo a pensar, ¿qué pasaría si pusieran cambiadores en los baños de hombres? Me imagino perfectamente varios puntos que pudieran hacer la experiencia un poco desagradable. Me imagino cambiando el pañal a mi hija y a la vez escuchar la novena sinfonía con puro instrumento de viento, espero que sepan a lo que me refiero. O bien, no faltaría el chismoso, preguntándome lo obvio: ¿qué haces? O en el peor de los casos, estaría cambiando el pañal y varios me verían con cara de !qué asco! !huele fatal! Sospecho que para que todos los baños de hombres tengan estas áreas disponibles, pasarán muchos años. Aún así, con todo los contras, definitivamente los usaría. Sólo buscaría el momento en que no hubiera gente para realizar la operación. 


Un hombre de verdad cambia pañales.
En varios lugares he visto que hay baños para familias, lo cual no es mala idea. Nunca he entrado, porque sólo los he visto en contadas ocasiones. Aún así, espero que exista ese tipo de instalaciones en lugares públicos o muy concurridos. En verdad ayudaría muchísimo. De lo contrario a los papás no dejan pocas lugares para cambiar pañales y nos motivan a ser creativos. Yo por ejemplo le he cambiado el pañal a mi hija en bancas, en el carro, en la carriola, en bancas y en más bancas. Y por más que trate de hacerlo lo más rápido posible, no evito que uno que otro olorcillo se propague por el aire. Además de que es incómodo cambiar el pañal en lugares que no están destinados para ello, es doblemente incómodo cuando la gente se te queda viendo con cara "¿no la puedes cambiar en otra parte?". Normalmente cuando recibo esa cara respondo con mi cara de "tu dime en donde la puedo cambiar y con todo gusto me voy ahí y lo hago, ¿tu crees qué me agrada hacer esto en estas condiciones?" Para aclarar, esa cara y mi cara de "vete a pudrir en el infierno" son muy parecidas. Casi idénticas.

Una vez que logro cambiarle el pañal a mi hija, depósito el pañal en los botes de basura. En cualquiera que tenga a la mano, lo ideal sería depositarlo en un bote de basura en el baño, sin embargo si normalmente cambió a mi hija en bancas, el bote más próximo es el afortunado en llevarse el premio que realiza mi hija. 


Técnica prometedora
La segunda dificultad con la que me topo y yo creo que muchísimas personas más también y no son necesariamente papás, es la falta de rampas y accesos para carriolas. Obviamente, muchas personas en sillas de ruedas deben sufrir este mismo problema, y en verdad comparto todo lo que pueden llegar a sufrir cuando se desplazan. En las calles, o no hay rampas y sí hay, algún listillo (idiota) estaciona su carro obstruyendo el paso. Esos mismos listillos mexicanos son los que se indignan cuando Arjen Robben hace trampa y finge una falta para provocar un penal. Congruencia es lo que falta en este país. Vamos a cumplir las leyes, si existen rampas o lugares de estacionamiento especiales, no nos hagamos los listillos y tratemos de engañar a los demás. Sí queremos que los demás cumplan con las reglas, y nos indigna ver como un jugador engaña, nosotros no hagamos lo mismo en el día a día. Y para finalizar este tema, sólo quiero decir: #noerapenal.


Actorazo
Además, aunado al problema de las rampas, es bastante común que cuando quieres usar un elevador te des cuenta que estos van llenos por personas que perfectamente pueden tomar otra vía para desplazarse, por ejemplo las escaleras eléctricas. Es preferible dejar los elevadores para personas que tengan su movilidad limitada o que realmente lo necesitan: papás con carriolas, adultos mayores, personas en sillas de ruedas, etc. Créanme, que como papá es muy complicado tener que mover una carriola solo. Es todo un arte nivelar el peso en las carriolas, cuidando que todo este a la mano: el bebé, la pañalera, las toallitas húmedas,el biberón, etc. Pero bueno, que exista un elevador es el mejor de los casos, ¿qué pasa cuando sólo hay escaleras y tienes que avanzar con tu bebé en la carriola? Prefiero tomarme una coca cola a temperatura ambiente antes que subir una carriola por las escaleras solo. No sabes sí tienes que bajar para adelante, para atrás, del lado, no sabes sí pedir ayuda, básicamente no sabes sí reír o llorar. En verdad, diez escalones pueden parecer cien. Por favor, si ven a personas en situaciones parecidas, hagan su buena obra del día. Puede ser un gesto muy sencillo, pero puede ayuda muchísimo y habla bien de nosotros como sociedad.

La tercera dificultad con la que me he topado es con la falta de facilidades para bebés en una gran parte de restaurantes. En varios restaurantes puedes encontrar sillas para bebés o lugares para sentarlos, lo cual es bueno y ayuda mucho. En otros hay menú para niños lo cual también ayuda muchísimo. Pero en una gran mayoría no hay ni sillas, ni menús, ni accesos, ni nada. Entiendo que hay lugares que son destinados para adultos y los niños son todo menos bien recibidos. Pero puede ser desesperante querer comer en un lugar que te gusta y no existan facilidades para ir con niños. Por ejemplo, hay lugares que nos gustan mucho a mi mujer y a mí, pero de inicio, no hay sillas y tienen la música con un volumen muy elevado para los niños. Y por favor, restauranteros, no siempre queremos ir a lugares en donde nos den cajitas felices. Sería genial que los locales de restaurantes tuvieran un sticker o una señal que indicara que el local es "child-friendly". Por que existen lugares que van más allá de tener sillas y un menú para niños; hay lugares que pueden ofrecer actividades o lugares de recreación más allá de la clásica zona de juegos plástica. En fin, creo que cada vez somos más los papás que sufrimos de estos problemas en los restaurantes y en verdad me encantaría no tener desarrollar problemas de obesidad por que las únicas opciones para comer con niños sean restaurantes de comida rápida.


¡Miren! ¡acaba de entrar un papá con una bebé de 2 años!
¡el ingenuo cree que aquí tienen sillas para bebé!
Existen muchos más problemas con los cuales te puedes enfrentar andando en la calle con tu bebé. Solamente mencioné estos tres problemas ya que son los que más me han dado dolor de cabeza. Afortunadamente tenemos automóvil, ya que no quisiera imaginarme el verdadero sufrimiento que significaría desplazarme en servicio de transporte público como Metro o autobús.

¿Mejorarán las cosas en el futuro?

En mi opinión, veo complicado que la situación mejore. Lo que sí tengo pensado hacer para ayudar a que mejore es que a cada lugar que vaya y vea que no hay rampas, que no hay sillas para bebés, o cambiadores para bebés, o bien exista cualquier dificultad para los papás, se lo haré saber a la empresa, ya sea hablando en persona, o a través de las redes social o por cualquier otro medio. Creo que lo único que puedo es levantar la voz cuando lo vea, y para que ojalá otros papás no tengan que sufrir lo mismo. Lo importante es que se escuchen las necesidades de papás como estos:



¡Gracias! ¡Gracias!

No hay comentarios:

Publicar un comentario